CUSCO : DEBATE ELECTORAL

FRAGMENTACION Y DESGOBIERNO

Jesús Manya Salas

La proliferación de partidos para las elecciones regionales y municipales en el Cusco, lejos de ser una consolidación del sistema de partidos democráticos, lo que hace es reflejar la precariedad y la crisis de la representación política. Si hacemos una disección geográfica en el lado de la derecha tenemos a muchos grupos como el fujimorismo, Unidad Nacional, Apra, Perú Posible, Restauración Nacional, en el centro se ubican Apu, Acción Popular, Alianza para el Progreso, Pan, mientras que por el costado izquierdo tenemos al Partido Nacionalista, Upp, Ari que es el membrete de Patria Roja, Autogobierno Ayllu, Tierra y Libertad.

Es decir cada espacio y tendencia será duramente disputada, la dispersión de la votación tendrá graves consecuencias para alcanzar el puntaje que requiere un triunfo en primera vuelta, pero sobre todo la fragmentación lo que genera es un escenario de pequeñas capillas que no ayudan a una gobernabilidad tan necesaria en la región y en la ciudad. Está claro por otro lado que sólo el Partido Nacionalista, Pan de San Román y en cierto grado el Apra y el fujimorismo han logrado articular listas en el conjunto de la región, el resto tiene una presencia muy regular para no decir insuficiente.

Por otro lado a pesar de que la legislación señala una especie de elecciones primarias al interior de los partidos, para elegir a los candidatos, esta fue reemplazada por la casería de candidatos en forma directa, del mismo modo que el transfuguismo fue otra señal permanente en muchos comportamientos, con unos cambios de camiseta en apenas unas horas. Así por ejemplo mientras que los partidos dirigían su atención a las formulas presidenciales y municipales, los candidatos al Consejo Regional fueron improvisados como una especie de premio consuelo, hecho que demuestra que los partidos desconocen la legislación regional en la que el Consejo Regional es un verdadero parlamento con iniciativa legislativa y fiscalizadora, para lo cual se requieren candidatos a la consejería con mucho nivel político y profesional.

Si las cosas están así en la región y la ciudad del Cusco, la proliferación y la improvisación en las provincias y distritos es peor. Connotados personajes conservadores y trayectoria dudosa encabezan las huestes de izquierda, así como redomados radicales de pasado reciente han terminado ocupando plazas en los partidos de la derecha. Una verdadera falta de coherencia programática que tendrá graves consecuencias ulteriormente en el comportamiento de gobierno

Ojala que la propia campaña, ayude a tamizar y mejorar esta realidad e incertidumbre, con un debate de propuesta y equipos de gobierno, de tal forma que las tendencias se definan con calidad e ideas, a fin de superar la compra de votos en que se convierten las campañas si se abusan de los recursos económicos y propagandísticos como en el pasado. En este proceso no es suficiente ganar las elecciones, es preciso que los partidos de acuerdo a sus tendencias empiecen a trabajar la gobernabilidad, acercando y concertando posiciones, tanto con sus pares electorales como con los movimientos sociales y ciudadanos que tienen una presencia regional y local importante.